Al igual que los humanos, los ojos de los perros cambian a medida que envejecen. Estos cambios pueden afectar la apariencia de los ojos y causar preocupación a los propietarios. La esclerosis lenticular es un cambio potencial que se observa en los ojos a medida que los perros envejecen. Afortunadamente, esta es una condición inofensiva que no requiere tratamiento. Sin embargo, la esclerosis lenticular puede confundirse con otras afecciones, como las cataratas. Solo un veterinario puede determinar qué está causando realmente los cambios en los ojos de su perro.
¿Qué es la esclerosis nuclear en perros?
La esclerosis nuclear, también conocida como esclerosis lenticular, es una afección ocular relacionada con la edad que conduce a una apariencia borrosa y azulada en los ojos. La lente del ojo es una estructura transparente hecha de tejido fibroso que se encuentra detrás del iris. Ayuda con la visión al enfocar la luz en la retina, ayudando a aclarar las imágenes.
La lente normal del ojo de un perro contiene tres partes:
- Corteza: la porción externa de la lente
- Cápsula: la membrana que rodea la lente
- Núcleo: el centro de la lente
La lente cambia y desarrolla nuevas capas regularmente a lo largo de la vida. Para dar paso a nuevas fibras, empuja fibras viejas hacia el núcleo de la lente porque no pueden abandonar la cápsula de la lente. A medida que un perro envejece, las viejas fibras en la lente se compactan, creando una apariencia nublada en el ojo. Esta densidad se llama esclerosis lenticular o nuclear.
La esclerosis lenticular es un producto del envejecimiento y generalmente comienza a aparecer en perros de mediana edad a mayores. La condición es indolora y no conduce a la ceguera.
Diagnóstico de esclerosis lenticular en perros
Los perros con esclerosis nuclear generalmente tendrán una apariencia nublada y de color azul en sus ojos. A primera vista, esta turbidez puede parecerse bastante a las cataratas. Sin embargo, un veterinario puede distinguir entre esclerosis lenticular y cataratas examinando de cerca los ojos. Durante este examen, su veterinario puede dilatar los ojos con gotas y usar una luz especial y una lente de mano para visualizar el interior y la parte posterior de cada ojo.
Es importante visitar a su veterinario cuando note por primera vez los cambios en los ojos de su perro. La causa de los cambios puede o no estar relacionada con la esclerosis lenticular. Otras condiciones oculares pueden ocurrir al mismo tiempo y pueden no ser aparentes a simple vista. Muchas afecciones oculares empeorarán o incluso serán irreversibles si no se tratan.
La esclerosis lenticular no afecta significativamente la visión en perros. Con el tiempo, su perro puede ver imágenes con menos claridad, especialmente desde la distancia. Si nota que la visión de su perro es anormal, lo más probable es que se deba a otro problema ocular, como cataratas o cambios en la retina relacionados con la edad. Su veterinario debe poder detectar la causa de la pérdida de visión durante el examen ocular o realizando pruebas oculares especiales.
Tratamiento y manejo de la esclerosis nuclear en perros
No es necesario ningún tratamiento para la esclerosis lenticular porque no causa molestias ni pérdida de visión. De hecho, no hay tratamiento disponible para la esclerosis lenticular en perros.
En humanos, cambios similares en las lentes pueden ser un factor que contribuye a la presbicia, una pérdida de visión cercana que generalmente hace que las gafas de lectura sean necesarias. Los humanos con discapacidad visual grave pueden someterse a una cirugía para mejorar la visión. Hay varios tipos de cirugía disponibles, uno de los cuales implica la colocación de una lente artificial. En perros, la cirugía para reemplazar la lente generalmente está reservada para el tratamiento con cataratas.
Es importante que su veterinario examine los ojos de su perro una o dos veces al año, especialmente a medida que su perro envejece. Las afecciones oculares no relacionadas aún pueden ocurrir mientras la esclerosis lenticular está presente. Es posible que no note otros cambios porque los ojos ya están nublados. Asegúrese de contactar a su veterinario de inmediato si nota pérdida de visión, dolor, secreción, hinchazón, enrojecimiento o cualquier otro signo de enfermedad.
Si su perro tiene otras afecciones oculares, su veterinario puede remitirlo a un oftalmólogo veterinario para obtener una opinión experta, para obtener diagnósticos avanzados y para analizar las opciones de tratamiento.
Si su perro experimenta pérdida de visión debido a cataratas u otro problema ocular, la esclerosis lenticular puede tener un impacto leve en la visión porque se agrava con el problema primario. Afortunadamente, hay formas de ayudar a su perro ciego a vivir una buena vida. La paciencia y la consistencia son los factores más importantes cuando se trata de cuidar a un perro ciego.